El monasterio, un posible lugar para la salvación
Quienes quieran acercarse y entrar a la vida monástica, deben pedirle a Dios que les abra este camino en todos los sentidos posibles.
Quienes empiecen a acercarse a la vida monacal, deben entenderla, en primer lugar, no de acuerdo a lo que dicen los libros y las leyes escritas, o solamente a partir de la experiencia de los Santos Padres o de los stárets de los distintos monasterios. Lo importante es entender el monaquismo, como todo lo demás, en su espíritu y su verdad, en su esencia. Quienes quieran acercarse y entrar a la vida monástica, deben pedirle a Dios que les abra este camino en todos los sentidos posibles. Y si, por medio de Dios, encuentran ese llamado y la legitimidad de tal llamado, y tienen la convicción interior de que ese es el lugar en donde habrán de salvarse, es posible que Dios obre y renueve todo lo que había quedado decrépito por causa del pecado, en el monaquismo o en otro lugar, sea en el retiro del anacoreta o en el mundo.
(Traducido de: Celălalt Noica – Mărturii ale monahului Rafail Noica însoțite de câteva cuvinte de folos ale Părintelui Symeon, ediția a 4-a, Editura Anastasia, 2004, p. 99)