Palabras de espiritualidad

El pecado nos priva de la Gracia

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Translation and adaptation:

Las enfermedades del cuerpo no son el peor mal para el hombre, porque, cuando son soportadas con humildad, fe y paciencia, pueden sanar al alma que padece por causa del pecado.

Las enfermedades del cuerpo no son el peor mal para el hombre, porque, cuando son soportadas con humildad, fe y paciencia, pueden sanar al alma que padece por causa del pecado, y pueden hacer que esta se acerque más a Dios, que es el bien más valioso para el hombre.

Para el hombre de fe, ni siquiera le muerte es algo aterrador, porque, por medio suyo, como si fuera una puerta, llegamos a donde está nuestro amoroso Dios, Quien “ha preparado para los que le aman”, “lo que el ojo no vio, lo que el oído no oyó, lo que ningún hombre imaginó (I Corintios 2, 9). Por su parte, el pecado es la peor de las miserias para el corazón, porque es igual a carecer del tesoro de la Gracia.

(Traducido de: Arhimandritul Serafim Alexiev, Viața duhovnicească a creștinului ortodox, traducere din limba bulgară de Valentin-Petre Lică, Editura Predania, București, 2010, p. 80)