Palabras de espiritualidad

El refugio de los cristianos

    • Foto: Flavius Popa

      Foto: Flavius Popa

Permanezcan en la barca de la Iglesia y obedézcanle, porque es el Cuerpo de Cristo. La Iglesia es nuestra madre común.

¿Qué otro consejo nos puede dar para la salvación del alma?

—Permanezcan en la barca de la Iglesia y obedézcanle, porque es el Cuerpo de Cristo. La Iglesia es nuestra madre común. Por medio suyo entramos al mundo, a la vida, y también con ella partimos a la vida eterna. Los cristianos nos parecemos a un árbol sembrado por Dios. Si una rama se rompe, morirá. Lo mismo pasa con los cristianos que se apartan de la Iglesia: mueren, dejan de tener vida y salvación, hasta que no vuelvan a la Iglesia. Cuando la mente del hombre retuerce las cosas de la fe y se aparta de la Iglesia, en vano resultan todas sus virtudes. Pero, en donde hay unidad y armonía, allí hay salvación y Dios concede Su auxilio. Los Santos Padres también dicen que, en los tiempos finales, dos cosas ayudarán a la Iglesia y a los fieles: el consuelo de la soledad más profunda, es decir, el refugio de las montañas, los bosques y las grutas, y la soledad en la mente, es decir, el saber conservar la fe en el misterio del corazón.

(Traducido de: Arhimandritul Ilie Cleopa, Ne vorbește Părintele Cleopa, ediția a II-a, volumul V, Editura Mănăstirea Sihăstria, Vânători-Neamț, 2004, p. 131)