Palabras de espiritualidad

El rol del temor de Dios en la lucha contra los malos pensamientos

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

El temor de Dios es el pastor que guía a las ovejas, es decir, los pensamientos.

El temor de Dios nos ayuda a librarnos de la lucha contra los malos pensamientos. Este es uno de los dones que Dios le concede al hombre. Quien recibe este don, aprende a luchar en todo momento por no hacer nada que sea desagradable al Señor. O, mejor dicho, no es él quien lucha, sino que el fuego de Dios disipa en él cualquier pensamiento pernicioso: «“Tal como la cera se derrite ante el fuego”, así es como se desvanece cualquier pensamiento impuro, por la acción del temor de Dios», señala San Talasio.

Aunque no hayamos recibido este carisma, el del temor de Dios, al menos tenemos que luchar por despertar en nosotros el sentimiento de la presencia de Dios y del Juicio Final. El temor de Dios es el pastor que guía a las ovejas, es decir, los pensamientos: «En aquellos que no se dejan gobernar por el temor (de Dios), los pensamienos deambulan sin sentido, cual ovejas sin pastor. Pero, cuando el temor (de Dios) los conduce, los pensamientos se mantienen en orden y dentro del redil» (Elías Ecdico).

(Traducido de: Mitropolitul Hierotheos VlachosPsihoterapia ortodoxă: știința sfinților părinți, traducere de Irina Luminița Niculescu, Editura Învierea, Arhiepiscopia Timișoarei, 1998, pp. 265-266)