Palabras de espiritualidad

El sufrimiento también es un don de Dios

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Tienes el privilegio de asumir el sufrimiento físico como una silenciosa labor divina, que no pretende forzarte a ser más juicioso, sino llenarte de un dulce consuelo.

«El sufrimiento es un gran don de nuestro Buen Dios. Entonces, entiende que tienes ese privilegio de asumir el sufrimiento físico como una silenciosa labor divina, que no pretende forzarte a ser más juicioso, sino llenarte de un dulce consuelo.

No te lamentes porque esto (tu padecimiento) te impide realizar otras actividades, como me escribes, pero tampoco pierdas la oportunidad de ser voluntariamente un hombre de la cruz».

(Traducido de: Arhimandritul Arsenie Papacioc, Scrisori către fiii mei duhovnicești, Mănăstirea Dervent, Constanța, 2000, p. 107)