Palabras de espiritualidad

Ese “sí” que le damos al Señor anula todos los “no” de nuestro pasado

    • Foto: Valentina Birgaoanu

      Foto: Valentina Birgaoanu

Uno de los más grandes dones que Dios nos concedió es la posibilidad de elegir nuestro propio camino de vida. El valor de poder decidir por nosotros mismos el rumbo que queremos seguir tiene que acompañarnos cada vez que las olas de la vida nos llenen de desánimo. La firme determinación de desprenderte de la monotonía en la que vives te ofrece la enorme posibilidad de gustar del don de la libertad interior.  

«Querida Estefanía,

Sí, tienes razón, una mala elección te cambia la vida para mal. ¡Pero, por complicada que parezca, la vida tiene la gran ventaja de poder volver a empezar en cualquier momento! ¡No hay camino sin salida en esta vida que no pueda ser transformado en una puerta hacia algo mejor! ¡Un nuevo comienzo! ¡Esta es la vida! Es una maravillosa e increíble aventura con nuestro Señor y Dios, que es todo amor y paciencia.

¡Él no nos evalúa según una calificación, para ver si aprobamos el curso! Lo que a Él le importa es que nos abramos a Su Gracia, ¡y esto también es algo que se aprende! Algunos con mayor facilidad que otros, ciertamente. Pero, una vez dices “”, no hay ningún “no” del pasado que pueda seguir ejerciendo poder sobre ti.

Toda la alegría viene por medio de ese “sí”. ¡Sé valiente! ¡Todo se trata de estar con Él y buscar Su Gracia y Su Reino!

Con afecto y confianza, 

M. Siluana».

(Traducido de: Maica Siluana Vlad, Dăruindu-ne, intrăm în bucuria Lui, Editura Doxologia, Iași, 2010, pp. 84-85)