Palabras de espiritualidad

¡Hagamos que la palabra del Evangelio fructifique!

    • Foto: Oana Nechifor

      Foto: Oana Nechifor

Escuchemos al Señor, Quien dice: “Los preocupaciones del mundo y la seducción de las riquezas ahogan la Palabra, y queda sin fruto”.

El dulce sabor de la Palabra del Evangelio, que lleva a la virtud, se eleva para que alcancemos el orden que nuestros santos padres, siguiéndolo con perseverancia, nos dejaron como enseñanza.

Lo mismo nosotros, buscando cómo alzar el amor de cada uno de ustedes, hacemos que a cada uno venga la Gracia de Dios, en el Espíritu de lo incorruptible, para que cada uno reciba de Él la palabra pura que nos da la teología. Escuchemos al Señor, Quien dice: “Los preocupaciones del mundo y la seducción de las riquezas ahogan la Palabra, y queda sin fruto”.

(Traducido de: Sfântul Simeon Stâlpnicul din Muntele Minunat, Cuvinte ascetice, Editura Doxologia, Iași, 2013, p. 93)