La confesión trae reconciliación
Confiésate, para que Cristo medie por ti, porque tal es Su cometido ante el Padre. No temas, pensando que no recibirás perdón.
Padre, he pecado contra Dios y ante ti. (Lucas 15, 21).
Esta es la confesión hecha frente al Creador de toda la naturaleza, Dador de misericordia y Juez de todo pecado. Aunque Dios lo sabe todo (Ester 4, 37; Juan 21, 17), espera las palabras de tu confesión…
Confiésate, para que Cristo medie por ti, porque tal es Su cometido ante el Padre (1 Juan 2, 1). Confiésate, para que la Iglesia ore por ti y para que los demás suspiren por ti. No temas, pensando que no recibirás perdón. Nuestro Mediador nos prometió el perdón. El Padre nos da la Gracia. Nuestro Mediador promete reconciliación con la buena voluntad del Padre. Crean, entonces, porque así es (Juan 14, 6; 1 Juan 5, 6). Consiente, porque es una virtud. Él media por ti, por una razón; de lo contrario, morirías en vano (Gálatas 2, 21). También el Padre tiene un motivo para perdonarnos: Él quiere lo que el Hijo quiere.
(Traducido de: Sfântul Ambrozie al Milanului, Tâlcuire la Evanghelia după Luca 7, 224 - 225, traducere pentru Doxologia.ro de Lucian Filip)