Padre, ¿qué es el infierno?

—Te lo voy a explicar, valiéndome de un relato que escuché en alguna parte. Una vez, un hombre muy sencillo le pidió al Señor que le mostrara el Cielo y el infierno. Así, una de esas noches, mientras dormía, escuchó una voz que le llamaba: “¡Ven para que te enseñe cómo es el infierno!”.

Y, en un abrir y cerrar de ojos, se halló en un salón donde había muchas personas sentadas alrededor de una mesa, en cuyo centro había una olla llena de comida. Sin embargo, toda esa gente se moría de hambre, porque no podían comer. Cada uno tenía una cuchara larguísima en la mano. Se servían la comida de la olla, pero no podían llevársela a la boca. Por eso, muchos de ellos gemían de dolor, algunos gritaban y otros lloraban...

Después, escuchó la misma voz: “¡Ven, ahora te mostraré el Paraíso!”. En ese mismo instante se halló frente a una mesa igual a la anterior, en cuyo centro también había una olla llena de comida. Aquí también cada persona tenía una cuchara larguísima en la mano. Pero todos parecían felices y contentos… porque cada uno utilizaba la cuchara para alimentar a su vecino de enfrente. ¿Has entendido cómo se puede vivir en el Paraíso ya desde esta vida?

(Traducido de: Cuviosul Paisie Aghioritul, Cuvinte duhovnicești, Vol. V Patimi și virtuți, Editura Evanghelismos, București, 2007, pp. 43-44)