La necesidad de la lucha espiritual
Si no libramos esa lucha, no podremos alcanzar la destreza, ni conocer nuestra debilidad, ni obtener la humildad.
Cualquiera que sea nuestra forma de vida, siempre tendremos que librar una lucha espiritual contra los espíritus de la maldad, quienes buscarán perturbarnos con las pasiones e incitarnos a la comisión del pecado, poniendo a prueba nuestro libre albedrío y nuestro amor a Dios. Si no libramos esa lucha, no podremos alcanzar la destreza (en lo espiritual), ni conocer nuestra debilidad, ni obtener la humildad. Y esta última es tan excelsa, que podría salvarnos aún sin el concurso de nuestras acciones, como dice San Isaac el Sirio.
(Traducido de: Sfântul Macarie de la Optina, Filocalia de la Optina, Editura Egumeniţa, Galaţi, 2009, p. 74)