La oración que elevamos en la iglesia
Haciéndonos la Señal de la Cruz y repitendo la “Oración de Jesús”, terminaremos alejando al demonio.
La oración que se hace en la iglesia es muy importante; en la iglesia es donde nos vienen los pensamientos y sentimientos más bellos. Es cierto que también el demonio nos acecha con más fuerza cuando vamos a la iglesia, pero, haciéndonos la Señal de la Cruz y repitendo la “Oración de Jesús”, terminaremos alejándolo. Lo mejor es permanecer en un rinconcito apartado y orar. “¡Levantemos el corazón!”, exclama el sacerdote, mientras nuestra mente a veces viaja quién sabe a dónde, pensando solamente en cosas inútiles. Nunca dejemos de luchar con ello.
(Traducido de: Sfântul Macarie de la Optina, Ne vorbesc stareții de la Optina, Editura Egumenița, Galați, p. 106