Palabras de espiritualidad

La oración que todos podemos practicar

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Cualquier persona puede, en donde quiera que esté y en sus propias circunstancias, invocar y repetir sin cesar el Nombre de Cristo.

La oración con un solo pensamiento se puede elevar en cualquier momento, lugar o circunstancia, y en todas las formas de nuestra vida comunitaria o particular. Esta oración no está vedada a quienes viven en el mundo (laicos), tal como erradamente sostienen algunos, aunque usualmente es practicada con más asiduidad entre los monjes.

Cualquier persona puede, en donde quiera que esté y en sus propias circunstancias, invocar y repetir sin cesar el Nombre de Cristo. ¡Quisiera provocar ese amor en ustedes! Inténtenlo, y pronto gustarán de los frutos de esta labor.

(Tracudido de: Gheronda Iosif Vatopedinul, Dialoguri la Athos, Editura Doxologia, p. 95)