La Santa Confesión nos trae la Gracia del Espíritu Santo
La Santa Confesión, como los otros sacramentos de la Iglesia, tiene el propósito de rebosar la Gracia del Espíritu Santo entre los hombres.
La Santa Confesión, como los otros sacramentos de la Iglesia, tiene el propósito de rebosar la Gracia del Espíritu Santo entre los hombres. El Espíritu Santo es la tercera Persona de la Santísima Trinidad, y la Gracia que mana de Él es una energía no-creada o un rayo de la energía no-creada de la Santísima Trinidad, que fluye sobre los hombres por medio de los siete sacramentos de la Iglesia. Cuando el hombre peca, se aparta de la Gracia recibida con el Bautismo; del mismo modo, tu última Confesión se aparta de ti según la gravedad de los pecados que cometes, especialmente si persistes en ellos. Con esto, en vez de la Gracia del Espíritu Santo, lo que en entra a tu corazón es el espíritu del maligno.
(Traducido de: Părintele Ioanichie Bălan, Spovedania, Taina Împăcării, Editura Doxologia, Iași, 2013, p. 12)