La serenidad que disipa toda aflicción
Translation and adaptation:
En momentos de aflicción, la solución más certera es la oración y la serenidad de confiarnos en las manos protectoras del Señor.
Recibe con sabiduría todo lo que sucede y no pierdas la serenidad por culpa de las penas, sabiendo que con esto serás recompensado por el Señor.
Ora cuando sufras, para que tu amargura se disipe lo antes posible.
Lo importante es que perseveres en la paciencia, en el coraje, en el temor de Dios y en la serenidad.
Permanece, sin pereza, en oración y pidiendo entre los suspiros de tu alma.
(Traducido de: Patericul Lavrei Sfântului Sava, Editura Egumenița, 2010, p. 141)
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