Palabras de espiritualidad

Los rasgos de los santos de Dios

  • Foto: Stefan Cojocariu

    Foto: Stefan Cojocariu

En ellos se refleja la santidad de Dios como en un espejo. En ellos toda la humanidad siente su dolor y pecado.

Los hombres con determinación son los héroes de la fe, los santos del cristianismo. Los santos conocen bien sus propias faltas. Por eso, juzgándose a sí mismos dignos del infierno, reciben el Paraíso del Señor y, cual don, la salvación.

Los que han alcanzado tal nivel no sienten solamente la espina de sus propios pecados, sino que también encuentran en ellos el murmullo de todos los pecados de los hombres. Y es que en ellos se refleja la santidad de Dios como en un espejo, y en ellos toda la humanidad siente su dolor y pecado.

Solamente a ellos nuestro Omnisciente Dios les permite combatir al maligno y arderlo incesantemente con la espada del Espíritu. Pero tampoco mantienen su mirada dirigida al astuto, sino que, ya que todo su ser es absorbido por la Gracia, se hacen como una llamarada en un fuego que no se consume, y, llenos del amor de Dios, tan solo con esto, porque todavía se hallan en este mundo, abrasan al enemigo en el corazón, como con una espada de lumbre.

(Traducido de: Părintele Arsenie Boca mare îndrumător de suflete din secolul XX, Editura Teognost, Cluj-Napoca, 2002, pp. 156-157)