Palabras de espiritualidad

“¡Muéstrate misericordioso conmigo, Señor!”

    • Foto: Oana Nechifor

      Foto: Oana Nechifor

La misericordia de Dios no es otra cosa que la Gracia del Espíritu Santo, y nosotros, los pecadores, estamos obligados a pedírsela permanentemente a Él.

¿Qué importancia tiene en todas estas oraciones la expresión “ten piedad de mí” o “muéstrate misericordioso conmigo”?

Demuestra que el hombre reconoce su estado de perdición; además, revela ese remordimiento, ese pesar por lo que hemos hecho, esa contrición que el Señor nos ordenó sentir y a la cual llegan muy pocas personas; demuestra, asimismo, admitir que hemos perdido todo mérito y que necesitamos la piedad de Dios, sin la cual el que está perdido no tiene ya ninguna esperanza de salvación.

La misericordia de Dios no es otra cosa que la Gracia del Espíritu Santo, y nosotros, los pecadores, estamos obligados a pedírsela permanentemente a Él.

(Traducido de: Sfântul Ignatie BriancianinovPredici la Triod și Penticostar, Editura Sophia, București, 2003, pp. 8-9)