Nuestra Madre está siempre cerca de nosotros
Ella está cerca de nosotros, tal como también el Señor está cerca de nosotros en el trabajo de nuestra salvación. ¡Preséntate ante ella con una fe fuerte, esperanza y amor!
Tienes que saber (y jamás olvidar) que nuestra Señora, la Madre de Dios, siempre está cerca del corazón, ayudándonos a alcanzar la salvación. Por esta razón, fue elegida de entre todos los pueblos por el Hijo de Dios para encarnarse en ella, sin mancha, por la misericordia del Padre y en colaboración con el Espíritu Santo, para librar a la humanidad del pecado, de la maldición, de la muerte eterna y de los tormentos perpetuos. Ella está cerca de nosotros, tal como también el Señor está cerca de nosotros en el trabajo de nuestra salvación. ¡Preséntate ante ella con una fe fuerte, esperanza y amor!
(Traducido de: Sfântul Ioan de Kronstadt, Viața mea în Hristos, Editura Sophia, București, 2005, p. 232)