¿Cómo puedo llegar a amar a la Madre del Señor, padre?

—Lee cada día sus Cánones (el Theoto­karion, que es una colección de sesenta y dos cánones a la Santísima Madre de Dios, reunidos por San Nicodemo el Hagiorita a partir de distintos manuscritos hallados en el Santo Monte Athos, y que fue editada en 1796). Esas oraciones te ayudarán mucho a que ames a la Madre del Señor. ¡Y después verás qué hace la Madre del Señor en tu vida! Te dará un consuelo inefable.

Padre, la madre superiora me dijo que necesito alcanzar un estado de vigilancia espiritual. ¿Qué me puede ayudar a encender nuevamente el fervor en mí?

—Lee cada día un canon del Theotokarion y verás cómo llegas al estado esperado. Haz de esto una regla. Si no puedes leer un canon entero, lee al menos el primer tropario de cada canto y los versos que aparecen al final del canon.

Padre, para ayudarme en la oración, ¿puedo fijarme un período de tiempo en el cual no haga otra cosa más que orar?

—En ese período puedes pronunciar la “Oración de Jesús”, pero también puedes hacer una Paráclesis o leer el Theotokarion.

¿Cuándo debo leer el Theotokarion, padre, en la mañana o en la noche?

—Es mejor leerlo en la mañana, de manera que lo leído permanezca en tu mente durante todo el día. De igual manera, cuando estés cumpliendo con tus obligaciones diarias, puedes detenerte un poco y leer un canon del Theotokarion.

En verdad, el Theotokarion ayuda mucho: enciende el corazón, mueve el alma. Me acuerdo ahora del hieromonje Cirilo, higúmeno del Monasterio Kutlumusion. Este, cuando leía el Theotokarion, no podía dejar de llorar y suspirar. Y es que una sola línea, una sola idea del Theotokarion te puede cambiar el alma.

(Traducido de: Sfântul Cuvios Paisie Aghioritul, Cuvinte Duhovnicești VI. Despre rugăciune, Editura Evanghelismos, București, 2013, pp. 66-67)