Palabras de espiritualidad

Para cumplir correctamente con tu regla de oraciones

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Lee sin prisa, concentrándote en cada palabra y atesorando en tu corazón cada idea. Y, si no puedes hacer esto, al menos trata de entender lo que leas y de vivir lo que entiendas.

Persígnate, haz una inclinación ante los íconos y comienza tu regla de oración. Lee sin prisa, concentrándote en cada palabra y atesorando en tu corazón cada idea. Y, si no puedes hacer esto, al menos trata de entender lo que leas y de vivir lo que entiendas.

Por ejemplo, lee: “... ¡purifícame de mis pecados!”. Siente tu estado de pecador, tu impureza, y anhela que tu corazón quede limpio de toda falta. Eso es lo que debes pedirle con fervor al Señor.

Cuando leas: “... hágase Tu voluntad”, abandónate con toda el alma y por completo a la voluntad de Dios, decidido y preparado para enfrentar con valentía espiritual todo lo que Él te envíe.

Al leer: “... perdona nuestras deudas, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores”, perdona de todo corazón a aquellos que te hayan hecho el mal, porque tú mismo le estás pidiendo al Señor que perdone tus faltas.

Si oras con este espíritu, estarás cumpliendo correctamente con tu regla de oraciones.

(Traducido de: Sf. Teofan Zăvorâtul, Călăuzire către viața duhovnicească, Editura Egumenița, p. 44)