Por qué la codicia es la peor de las pasiones espirituales
El mismo Apóstol nos lo dice claramente: “el amor al dinero es la raíz de todos los males” (I Timoteo 6, 10).
Quiero hablar ahora de la peor de las pasiones: la codicia o el amor a lo material. ¿Por qué es la peor de todas? Porque de ella brotan todos los males. El mismo Apóstol nos lo dice claramente: “el amor al dinero es la raíz de todos los males” (I Timoteo 6, 10).
La ira, los apetitos y otros impulsos espirituales, si sobrepasan determinados límites, perjudican la salud del alma. Si comes en exceso, dañas la salud de tu cuerpo. La mente, si piensa más de lo que puede resistir, se oscurece y pierde toda capacidad intelectual. El ojo, si es expuesto a una luz muy fuerte, puede perder su capacidad de ver. El oído, si es expuesto a un sonido ensordecedor, termina perdiendo su capacidad auditiva. Todo esto nos enseña a dónde nos puede llevar la codicia y cuán peligrosa es.
(Traducido de: Sfântul Ioan Gură de Aur, Problemele vieții, Editura Egumenița, Galați, p. 44)