Palabras de espiritualidad

Sobre la lucha contra los pensamientos impuros

    • Foto: Constantin Comici

      Foto: Constantin Comici

Mi cabeza está llena de pensamientos perniciosos y sufro mucho por ello…”

Un hermano vino a buscar al abbá Pimeno y le dijo: 

—Padre, mi cabeza está llena de pensamientos perniciosos y sufro mucho por ello.

Entonces, el anciano lo llevó afuera, a un lugar muy elevado, y le dijo:

—Extiende tus brazos e intenta atrapar el viento.

El monje le dijo:

—¡Eso es imposible, padre!

Con una sonrisa, el anciano respondió:

—Si no puedes hacer esto, tampoco puedes impedir que los pensamientos vengan a tu mente. Sin embargo, una cosa completamente distinta es desaprobarlos.

(Traducido de: Patericul, ediția a IV-a, revizuită, Editura Reîntregirea, Alba-Iulia, 2004, p. 183)