Palabras de espiritualidad

Todas las cosas de este mundo pasarán

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

En ningún lugar hay paz verdadera, sino solo en el único Dios verdadero, como dijo el profeta Elías en el monte Horeb: “Dios no está en el torbellino” (3 Reyes 19, 11).

Muchos son los que, habiendo caído en las garras de las pasiones carnales, se corrompieron. Y quienes aún hoy se dejan atrapar por ellas, también se pudrirán. La pasión carnal y el amor no durarán para siempre, y la belleza pasajera no permanecerá así, sino que se convertirá en corrupción. Tampoco la riqueza durará para siempre, sino que pasará, al igual que la honra y el poder humanos, porque viene la muerte y todo eso se disipa, tal como dijo alguien: “Este mundo y todo lo que ahora es pronto se desvanecerá, como la pasión del cuerpo; al igual que todo deleite terrenal, todo eso pasará como la sombra”. No hay pasión ni amor carnal que no se convierta en una carga, no hay belleza temporal que no se transforme en podredumbre, no hay deleite carnal que no se vuelva inmundicia, y en ningún lugar hay paz verdadera, sino solo en el único Dios verdadero, como dijo el profeta Elías en el monte Horeb: “Dios no está en el torbellino” (3 Reyes 19, 11).

 (Traducido de: Sfântul Dimitrie al RostovuluiAlfabetul duhovnicesc, Editura Sophia, București, 2007, p. 49)