El Padre Archimandria Sofronio nos llama la atención entre la diferencia entre teología coyuntural y “teología de acuerdo a Dios”:

“Mientras el corazón no logre purificarse de todo vicio, la contemplación de Dios le resultará imposible de alcanzar. Sólo un corazón libre de vicios es capaz de dejarse penetrar por el asombro y la humildad específicos de la contemplación del Creador sobre ese mismo asombro y esa humildad que tranquiliza la mente, llenándola de una felicidad indescriptiblemente serena.”

“El teólogo tiene como objetivo principal alcanzar la teoría, mientras que el monje, alcanzar la ascesis. El propósito más importante del monje es obtener la paz de la oración del corazón, liberar su mente de todo pensamiento, vigilar incesantemente su corazón de cualquier invasión de lo meramente terrenal. Allí donde existe esa paz santa, el corazón y la mente se alimentan del nombre de Jesús y de Sus mandamientos, diluyéndose entre sí y controlando todo lo que sucede dentro de la persona, no por medio de un sistema lógico de indagación, sino de forma intuitiva, por medio de un sentido espiritual especial. (...)

El objetivo del monje es obtener la capacidad de permanecer siempre alerta, con el corazón y la mente, de manera que, después de muchos años de esfuerzo, su corazón se vuelva sensible y su mente reciba el poder de rechazar cualquier pensamiento vicios. Siguiendo a las incontables lágrimas de arrepentimiento derramadas con el corazón triste, su oración se hace incesante, mientras que el sentido de presencia y del actuar divino, se hace evidente y profundo”.

(Traducido de: Mitropolit Hierotheos Vlachos, Psihoterapia ortodoxă: știința Sfinților Părinți, traducere de Irina Luminița Niculescu, Editura Învierea, Arhiepiscopia Timișoarei, 1998, pp. 383-384)