El que tiene fe se encuentra bajo la protección de Dios y bajo el manto de la Madre del Señor. ¿Con qué podemos luchar en contra del maligno? ¿Recuerdan, queridos fieles, lo que dije alguna vez, en relación a lo escrito por el padre Arsenie Boca en “Cărarea Împărăției”, sobre cómo ahuyentar al maligno? ¿Cómo luchar en contra de él? Allí se nos dice que luchamos con el nombre de Jesús y de la Madre del Señor, con “Señor Jesucristo, Hijo de Dios, ten piedad de mí, pecador”, impidiéndole al astuto que entre en nuestra mente, porque allí es donde comienza todo su poder. Luego, con la Señal de la Cruz, (como dice un canto de la Iglesia): “Señor, Tu Cruz nos diste como arma en contra del maligno..."   Y también luchamos en contra suya con algo más, algo que él no tiene: la humildad.

(Traducido de: Arhimandrit Teofil Părăian, Cuvinte către tineri, Editura Omniscop, Craiova, 1998, p. 32)