Palabras de espiritualidad

¿Cómo puedo aprender a orar sin cesar?

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Translation and adaptation:

San Isaac el Sirio dice: “Sin una oración incesante, es imposible acercarse a Dios”.

Dios nos enseña a orar sin detenernos: “Orad incesantemente” (I Tesalonicenses 5, 17). El venerable Isaac el Sirio dice: “Sin una oración incesante, es imposible acercarse a Dios”. Por eso, no basta con completar nuestra regla de oración doméstica y asistir a la iglesia. Al contrario, como dice el Señor, debemos aprender a orar de forma incesante. ¿Cómo?

Veamos el consejo que nos da San Teófano el Recluso: «En el transcurso del día, acostumbrémonos a dialogar con Dios constantemente, utilizando pocas palabras, de acuerdo a nuestro estado espiritual y a lo que estemos haciendo en el momento respectivo. Por ejemplo, al comenzar a trabajar en algo, podemos decir: “¡Bendíceme, Señor!”. Al terminar, podemos exclamar: “¡Gloria a Ti, Señor!”. Y no solamente con la boca, sino también con el corazón... Esto es aplicable a todas nuestras demás actividades. O podemos repetir una y otra vez: “¡Señor, ten piedad!”. O, dirigiéndonos a la Madre del Señor: “¡Madre de Dios, ten piedad de mí!”. También podemos pedirle a nuestro ángel: “¡Ángel de Dios, mi santo custodio, protégeme!”. Podemos utilizar también otras palabras, pero lo importante es que lo hagamos con frecuencia y esmerándonos en que cada palabra brote de nuestro corazón...»

(Traducido de: Nikolaj Evgrafovich Pestov, Cum să ne creștem copiii: calea spre desăvârșita bucurie, traducere din limba rusă de Lucia Ciornea, Editura Sophia, București, 2005, p. 52)