Cristo no escudriña nuestro pasado
El pecado es como la lluvia: si sales afuera, te mojarás. Pero Dios, Quien es la fuente de toda bondad, nos perdona aun en el último momento.
Nuestro Señor Jesucristo, Quien está libre de toda falta, no examina nuestro pasado. “Porque nadie está libre de pecado, sino solamente Tú…”. Sin embargo, hermano, ahora todo depende de que no vuelvas a pecar.
Dios te dice: “Ahora que me conoces, tienes que enrolarte”. Detente ahí donde estás. Él siempre acude al encuentro de quien clama por Su ayuda. El pecado es como la lluvia: si sales afuera, te mojarás. Pero Dios, Quien es la fuente de toda bondad, nos perdona aun en el último momento. Una vez empiezas a creer, Él te ilumina. Si no nos perdonara, no recibiríamos esa luz.
(Traducido de: Anastasie Malamas, Ca aurul în topitoare. Viața mucenicească a unui Iov al zilelor noastre, traducere din limba greacă de Ieroschimonah Ștefan Nuțescu, Editura Evanghelismos, București, 2012, p. 51)