Palabras de espiritualidad

El mejor ejemplo para evitar distraernos al orar

    • Foto: Adrián Sarbu

      Foto: Adrián Sarbu

Si un hombre se presenta ante su monarca, pero, volviendo el rostro, empieza a dialogar con uno que es enemigo del reino, se hace digno de ser aborrecido.

San Juan Climaco escribió que si un hombre se presenta ante su monarca, pero, volviendo el rostro, empieza a dialogar con uno que es enemigo del reino, se hace digno de ser aborrecido, tampoco Dios puede sufrir al cristiano que se deleita con pensamientos impuros cuando ora. ¡Acuérdate, tú que oras, de estas palabras!

(Traducido de: Preasfinţitul Ieremia Zăvorâtul, Reţetar duhovnicesc sau Doctorie duhovnicească adunată din lume, Ed. Sophia, Bucureşti, 2013, p. 55)