El rol del oxígeno en nuestro cuerpo
El organismo acepta lo que necesita y rechaza lo que puede, y lo que no puede asimilar lo acumula en los huesos y en los músculos.
Nuestro cerebro consume mucho oxígeno, aproximadamente un 80% del oxígeno que llevamos en nuestro interior, y es necesario que el organismo entero también reciba su parte. Si no tenemos suficiente oxígeno, nos sentimos débiles, cansados, sin energía física y psíquica... y nos preguntamos ¿qué pasa con nosotros? Bien, trabajamos y respiramos con solamente un cuarto de nuestros pulmones, lo que es poco; por eso es que se les recomienda a los ancianos y a los jóvenes que corran, porque, cuando corres, quieras o no, tienes que respirar profundamente. Por eso, es importantísimo movernos constantemente y hacer que nuestras articulaciones se pongan en acción, para no atrofiarnos. Sabemos que la artritis empieza en la juventud, a veces antes de los treinta años. A todos nos gusta comer hasta saciarnos, y este es un problema muy grande. El organismo acepta lo que necesita y rechaza lo que puede, y lo que no puede asimilar lo acumula en los huesos y en los músculos. Así, ¡después venimos a enterarnos de que la artritis es más peligrosa que el reumatismo! Y es que esta dolencia podría terminar paralizando a la persona entera.
(Traducido de: Starețul Tadei de la Mănăstirea Vitovnița, Pace și bucurie în Duhul Sfânt, Editura Predania, p. 93)