El valor de hacernos humildes
Translation and adaptation:
En la misma medida en que nos vayamos purificando, la Gracia Divina irá abriendo los ojos de nuestro corazón para que podamos ver la verdadera Luz.
Si nos esmeramos en purificar nuestro corazón de sus pasiones (y si no las enardecemos), en la misma medida en que nos vayamos purificando, la Gracia Divina irá abriendo los ojos de nuestro corazón para que podamos ver la verdadera Luz. “Bienaventurados los puros de corazón, porque verán a Dios” (Mateo 5, 8), pero especialmente los que se perfeccionen con la humildad, porque los misterios les son revelados únicamente a los que se hacen humildes.
(Traducido de: Sfântul Macarie de la Optina, Filocalia de la Optina, Editura Egumeniţa, Galaţi, 2009, p. 43)
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