La alegría de conocer a un hombre justo
Es hermoso alegrarnos cuando vemos en otro lo que nosotros mismos, si pudiéramos, quisiéramos cultivar en nuestro interior.
El que siente alegría al ver a un hombre justo, es porque también él quiere ser justo. Es hermoso alegrarnos cuando vemos en otro lo que nosotros mismos, si pudiéramos, quisiéramos cultivar en nuestro interior. Es natural en las personas buenas que el retraído prefiera al casto, el sabio al prudente, y el caritativo al generoso. Esto es como admirar en el otro las virtudes propias. Sin mencionar que, para muchos, ver a un santo representa un llamado a la redención, incluso para los más avezados en lo espiritual, por tratarse simplemente de un motivo para al regocijo. ¡Qué lindo es, entonces, hacer que otros vean esto, llevándolos a obtener frutos de esta alegría!
(Traducido de: Sfântul Ambrozie al Mediolanului, Viu va fi sufletul meu – părți alese din Comentariul la Psalmul 118, trad. Pr. Constantin Necula, Editura Oastea Domnului, Sibiu, 2000, p. 64)