—Si una amistad no lo es en Cristo (una relación entre un chico y una chica), ¿Qué debemos hacer? ¿Terminamos esa relación o seguimos luchando por salvarla?

—Cristo diría:

“Si tu ojo te hace pecar, sácatelo y arrójalo lejos de tí. Si tu mano derecha te hace caer en pecado, córtatela y arrójala lejos de tí”.

No se refería a los miembros del cuerpo, como algunos llegaron a interpretarlo, sino a quienes nos alejan de Él, porque “cortar” a una persona de tu vida es tan doloroso como cortarte alguna extremidad o sacarte un ojo, a veces aún más doloroso.

Desde luego que es mejor salvarla, porque siempre es mejor salvar algo que perderlo, es mejor luchar todo lo que podamos para evitar el pecado. Es mejor, entonces, intentar salvar esa relación, porque ¿si ya se encontraron, qué más queda por hacer? Sólo la vida monástica tiene las guías establecidas para terminar con todo, así, tajantemente, pero no siendo éste el caso, luchen, luchen por salvarla

Si no logran salvarla, sin cometer pecado, mejor córtenla, porque así lo mandó Cristo.

(Traducido de: Savatie Baștovoi, Două conferințe despre curaj și libertate în ortodoxie și alte întrebări fără rânduială, Editura Sophia, 2002, p. 107)