La armonía de Dios se esconde en la diferencia de caracteres
¿Pero es que no se dan cuenta que en la diferencia de caracteres se esconde la armonía de Dios? Los caracteres diferentes crean armonía.
Algunos me dicen: “Padre, no me entiendo con mi esposa. Tenemos caracteres completamente distintos. ¿Cómo es que Dios permite cosas tan extrañas? ¿No podría, talvez, disponerlo todo para que nos acomplemos perfectamente a nuestra pareja, para que podamos vivir espiritualmente?”.
¿Pero es que no se dan cuenta que en la diferencia de caracteres se esconde la armonía de Dios? Los caracteres diferentes crean armonía. ¡Ay de ustedes, si tuvieran el mismo carácter! ¿Qué pasaría si, por ejemplo, ambos fueran raudos para enfurecerse? Terminarían derribando la casa. ¿O si los dos fueran sosegados? Se quedarían dormidos de pie. Si ambos fueran avaros, digamos que talvez se entenderían... pero se irían juntos al infierno. Y si, al contrario, ambos dieran todo lo que tienen, ¿cómo podrían mantener su hogar? Terminarían dilapidando todo y sus hijos se perderían en quién sabe qué caminos. Si pones un leño torcido junto a otro leño torcido, ¿ves cómo no encajan? Ahora, escucha qué es lo que sucede. Dios dispone que una persona buena se una a un “leño torcido”, para ayudarlo, porque puede ser que éste tenga buenas intenciones, pero que no haya sido ayudado a crecer correctamente.
(Traducido de: Cuviosul Paisie Aghioritul, Viaţa de familie, volumul IV, Editura Evanghelismos, Bucureşti, 2003, pp. 39-40)