La Gracia Divina latente en los santos íconos
La Gracia de los santos íconos la sienten los fieles de cualquier aldea, de cualquier ciudad, que aman a la Iglesia como a Cristo Mismo.
Hay muchas personas que ven en los santos íconos meros objetos con un cierto valor artístico e histórico, haciendo a un lado su naturaleza portadora de la Gracia y la santidad. Admiran maravillados su antigüedad, sus colores y la destreza con la que fueron hechos, pero no perciben, no sienten el espíritu que vibra y se transmite por medio de ellos. La Gracia de los santos íconos la sienten los fieles de cualquier aldea, de cualquier ciudad, que aman a la Iglesia como a Cristo Mismo, y también aman a los santos, los amigos de Cristo. Tanto ellos como nosotros, al mismo tiempo, vemos y sentimos en los íconos la presencia permanente de los santos entre nosotros.
(Traducido de: Un pridvor al Raiului. Mănăstirea Sihăstria, Editura Mănăstirea Sihăstria, 2008, p. 75)
