¡Lucha por tu familia y pide la ayuda de Dios!
Debes luchar por tu familia, porque no se trata sólo de tu relación con tu esposo, sino de todo lo que esto puede afectar desde ya a tus pequeños hijos.
Debes luchar por tu familia, porque no se trata sólo de tu relación con tu esposo, sino de todo lo que esto puede afectar desde ya a tus pequeños hijos.
Lo primero que debes hacer es orar por tu esposo y pedir la ayuda de los santos mártires Gurias, Samonas y Abibos, para que protejan a tu familia.
En segundo lugar, y no menos importante, debes dirigir tu mirada a tu corazón y observar todo con atención, para indagar si no es culpa tuya que tu esposo se vaya de casa. Mi oración sólo puede ayudar la tuya. ¡Y no olvides que los niños suelen repetir los errores de sus padres!
La felicidad humana no consiste en otra cosa que en la unión con Dios, al cumplir con Sus salvadores mandamientos. Partiendo de todo esto, intenta resolver esos problemas tan importantes en tu vida.
(Traducido de: Arhimandritul Ioan Krestiankin, Povăţuiri pe drumul Crucii, Editura de Suflet, Bucureşti, 2013, pp. 175-176)