Palabras de espiritualidad

No es un camino fácil…

  • Foto: Tudor Zaporojanu

    Foto: Tudor Zaporojanu

Algo tendremos que sufrir por casua de nuestros pecados, si no en esta vida, en la eternidad. Solamente que en la vida futura las tribulaciones serán realmente atroces. ¡Que el Señor nos libre de ellas!

Seamos pacientes ante las ofensas, porque algo tendremos que sufrir por casua de nuestros pecados, si no en esta vida, en la eternidad. Solamente que en la vida futura las tribulaciones serán realmente atroces. ¡Que el Señor nos libre de ellas, con Su Gracia y Su amor a los hombres!

Si no soportamos las aflicciones, incluso si las soportamos, pero lamentándonos, disgustados, tristes y con repreoches, ¿de qué clase de paciencia estamos hablando? No es más que el enraizamiento en nosotros de la maldad, la ira, y de ahí viene el orgullo. No hay nada extraordinario en el hecho que el monje soporta aflicciones que el mundo desconoce. El camino al Reino Celestial es estrecho y espinoso, y el primero en recorrerlo fue nuestro Señor Mismo, el Salvador del mundo.

(Traducido de: Ne vorbesc Stareții de la Optina, traducere de Cristea Florentina, Editura Egumenița, 2007, p. 194)