Solo Dios conoce la verdad que subyace debajo de nuestros actos
Nosotros vemos solamente el exterior de las cosas, no las inclinaciones y las intenciones de cada quien, que serán el criterio por el que tales actos serán juzgados.
Debes saber que el Señor no observa nuestras acciones desde fuera, sino nuestras intenciones. A Él le interesa saber por qué actuamos de una manera u otra, y si considera que nuestra intención es buena, podemos estar en paz.
Por eso no debemos juzgar a nadie, en ninguna circunstancia: nosotros vemos solamente el exterior de las cosas, no las inclinaciones y las intenciones de cada quien, que serán el criterio por el que tales actos serán juzgados. Y esas razones o intenciones solo las conoce Dios, Quien puede ver lo que hay en cada corazón.
(Traducido de: Filocalia de la Optina, traducere de Cristea Florentina, vol. I, Editura Egumenița, Galați, 2009, p. 162)