Palabras de espiritualidad

¡Demostremos nuestra pertenencia espiritual, valiéndonos también de la Señal de la Cruz!

  • Foto: Bogdan Zamfirescu

    Foto: Bogdan Zamfirescu

Todo lo que es marcado con la Señal de la Cruz se vuelve temible para el maligno.

El Santo Profeta David dice, sobre los hombres del presente, que todos terminarán apartándose del camino correcto. No obstante, les pido, hijos míos amados, que conserven en su interior, con todas sus fuerzas, el espíritu de la buena fe; es decir, háganse la Señal de la Cruz antes de comer y beber, al salir de casa y al entrar en ella, y al comenzar cualquier actividad. Todo lo que es marcado con la Señal de la Cruz se vuelve temible para el maligno, aunque haya algunos que, en su equivocación, consideren una necedad persignarse, justificándose así: “¿Qué van a decir de mí los demás si me miran persignándome?”. Sin embargo, no tenemos que pensar en lo que van a decir los demás, sino en lo que dirá el Mismo Señor el Día del Juicio Final, recordando nuestra actitud aduladora hacia los otros. En esto tenemos que pensar, y no en lo que digan o piensen los vanidosos sobre nosotros.

(Traducido de: Mari stareţi ruşi: vieţile, minunile, îndrumările duhovniceşti – Din învăţăturile duhovniceşti ale Cuviosului Stareţ Antonie de la Optina, vol. I, trad. din limba rusă: dr. Gheorghe Zapotinschi, Editura Sophia, 2008, pp. 519-520)