¿Qué es lo que Dios quiere de mí?
La vida no está hecha sólo de trabajo y papeleos. La vida es un cúmulo de sentimientos, de relaciones y rupturas, a los que debes enfrentarte. Algunas veces, un acta de divorcio no te libra de esa persona que amabas, como tampoco un certificado de matrimonio te hace amar o ser amado.
La sociedad de consumo ha educado esta generación en la que las personas pueden evitar sus responsabilidades y hacer cualquier cosa por medio de papeles: contratos, reglamentos, acusaciones...
Sin embargo, la vida no está hecha sólo de trabajo y papeleos. La vida es un cúmulo de sentimientos, de relaciones y rupturas, a los que debes enfrentarte. Algunas veces, un acta de divorcio no te libra de esa persona que amabas, como tampoco un certificado de matrimonio te hace amar o ser amado.
¿Qué puedes hacer con tu vida, más allá de tanto formulario, allí donde ningún argumento te puede resolver una duda, en donde los remordimientos te podrían destruir y en donde una elección, aparentemente exitosa, podría llevarte al desastre?
En otras palabras, ¿cuál es la voluntad de Dios para con nosotros? ¿Cómo podemos saber si estamos en el camino correcto y cuándo decidirnos a abandonar una senda que hemos comprobado es equivocada?¿Cómo aprender de los errores y cuál es el propósito de ese abandono en el que algunas veces nos lanza el Buen Dios?
(Traducido de: Ieromonah Savatie Baștovoi, Sindromul „cesăfac”, Editura Cathisma, București, 2014, p. 6)