El ayuno de Cristo, un modelo para nosotros
Dios nos dijo que nos abstuviéramos por un motivo bien fundamentado, porque la medida de todas las cosas es Jesucristo.
Creo que todos hemos oído hablar de esas personas que se hacen llamar “vegetarianos”. No son personas de ayuno espiritual, sino que simplemente cuidan su salud física. Claro que sería muy bueno que todos comiéramos solamente verduras, pero Dios no nos pidió esto. Dios nos dijo que nos abstuviéramos por un motivo bien fundamentado, porque la medida de todas las cosas es Jesucristo.
Porque Él vino y nos demostró todo lo que puede hacer el ser humano. Sufrió, aceptó, vio, comprobó. Por eso, no podemos decir que Él fue capaz de ayunar durante cuarenta días, simplemente por el hecho de ser Dios, sin superar nuestra naturaleza humana. Moisés ayunó durante cuarenta días, Cristo también. Cristo-Dios ayunó con su naturaleza humana, no con su naturaleza divina, porque esta no necesita ayunar, porque no puede ni ayunar ni sufrir.
(Traducido de: Preotul Nicolae Tănase, Să nu-L răstignim iarăși pe Hristos, Editura Agaton, Făgăraș, 2011, p. 249)