arrepentimiento

Palabras de espiritualidad

La alegría del arrepentimiento

A menudo me preguntan, “¿Cómo debemos confesarnos?”. La respuesta, directa y decidida, es: “Confiésate como si fuera tu último instante de vida, como si fuera la última vez, la última oportunidad de...

Palabras de espiritualidad

La oveja perdida

“En el Cielo hay más alegría por un pecador que se arrepiente”, noten con atención, “que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentirse” (Lucas 15, 7). Siento escalofríos cada vez que...

Palabras de espiritualidad

El don de Dios llena todos nuestras carencias

Aunque alguien cometa todas las maldades del mundo, pero aún así no pierde su esperanza en Dios y se arrepiente rápidamente, se salvará.

Palabras de espiritualidad

Sopesemos los hechos de nuestra vida con la balanza de la eternidad

Mientras más te interrogues sobre tu eternidad, en esa misma medida tu mente se sacudirá todos los pensamientos vanos de este mundo, haciéndose más sabia con el don de Dios.

Palabras de espiritualidad

La única traición virtuosa

Escondiendo nuestros pecados le hacemos un enorme favor al maligno, quien nos invita a cometer infamias y luego a ocultarlas en nuestra alma, como si se tratara de un tesoro suyo, que le servirá para...

Palabras de espiritualidad

¿Quién debe arrepentirse?

¿Qué se puede decir de nosotros, cristianos normales, que no nos atrevemos a calificarnos como “grandísimos” pecadores, que no hemos vivido en concubinato, que no nos hemos ensuciado en el desenfreno...

Palabras de espiritualidad

De cómo el amor al prójimo transformó un ladrón en monje

Humillándose, el ladrón clamó al anciano: “¡Creo en Dios y de hoy en más dejaré de hacer tropelías; tampoco volveré a matar, ni a robar, sino que me iré contigo y me arrepentiré de todos mis pecados...

Palabras de espiritualidad

La contrición con alegría

Creo que todos los santos se arrepentieron con alegría, porque sólo aquel que tiene esperanza puede arrepentirse en verdad. Al contrario, el que no tiene esperanza llega a experimentar una profunda...

Palabras de espiritualidad

¿Sabemos el precio de postergar nuestro arrepentimiento?

“El Señor mencionó al ladrón en el último momento, para que nadie pierda la esperanza. Pero únicamente uno sólo, para que tampoco nadie espere demasiado de Su misericordia” (Felicísimo Agustín)

Palabras de espiritualidad

¿Cómo debemos prepararnos para la Santa Confesión?

Antes de confesarnos, pidámosle a Dios que nos ilumine para hacer una confesión correcta y que nos llenemos de un arrepentimiento que nos haga sanar.

Palabras de espiritualidad

¿Qué es lo que deben saber los fieles sobre el Sacramento de la Confesión?

Este sacramento, llamado también “segundo bautizo”, fue instituido por el Hijo de Dios y es obligatorio practicarlo, para el perdón de los pecados.

Palabras de espiritualidad

El hombre es la imagen de Dios

El hombre es la imagen de Dios y esa es la razón por qué Su hijo se hizo hombre: para restaurar Su Imagen. En los textos de los Santos Padres se desarrolla claramente esta idea.

Palabras de espiritualidad

El hombre es perfectamente libre de aturdirse con lo que quiera

Nuestra voluntad, nuestra testarudez, nuestro vicio, el pecado, son ofuscaciones más fuertes y peores que el vino. ¡Pero yo, que me dejo llevar por ellas, me muestro reservado cuando se trata de la...

Palabras de espiritualidad

El alma se estremece como una hoja en otoño

También el alma se estremece, como se estremece una hoja en otoño con el más leve soplo del viento. Porque los ángeles dicen: “¡De acuerdo a tus obras, Aleluya! Nosotros te hubiéramos ayudado, pero...

Palabras de espiritualidad

“He pecado”

¿Tan difícil es confesar tu pecado? Porque si tú mismo no te condenas, será el maligno el que lo haga.

Palabras de espiritualidad

¡Las lágrimas de contrición son lo más valioso que hay en este mundo!

Viajando por el mundo, en un bosque observó a un anciano que lloraba amargamente por sus pecados, junto a un árbol. Entonces el ángel vio que las lágrimas del anciano parecían de fuego. Y recogiendo...

Palabras de espiritualidad

Cristo cambia hasta nuestros “gustos”

Cuando Cristo entra en nuestra vida, Él cambia nuestros “gustos”. El hombre que ha nacido de nuevo tiene alegrías diferentes. No le interesan la vida y las cosas de este mundo.

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