fuerza de la oración

Palabras de espiritualidad

Él nos sana de toda enfermedad

La probada experiencia de la Iglesia ha demostrado que, para la oración, es decir, para Dios, ninguna enfermedad del espíritu es incurable.
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Palabras de espiritualidad

Todo lo que puede hacer la oración

Algunas veces hasta una oración pequeña, pero elevada con toda el alma y con todo el corazón, es de gran utilidad... si la pronunciamos con convencimiento.
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Palabras de espiritualidad

Un breve relato sobre la fuerza de la “Oración de Jesús”

El monje, recobrándose y meditando en lo que acababa de vivir, se alegró mucho por haber mermado a los demonios y le dio gracias a nuestro Señor Jesucristo.
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Palabras de espiritualidad

La oración es la respiración del corazón

“Uno de los más grandes dones que Dios nos dio, es la posibilidad de estar permanentemente en contacto con Él, en cualquier lugar, en cualquier momento”.
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Palabras de espiritualidad

No hay oración que se pierda ante Dios

Así, por medio de esta provechosa paciencia, Dios salva al hombre, preparándolo, con toda humildad, para que guste de la futura dulzura gratífica.
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Palabras de espiritualidad

¿Es posible que hayamos olvidado el poder de la oración?

La oración es abogada de los acusados, liberación de los sometidos, buen corazón de los marginados, dulzura de los que se alegran y consuelo de los que lloran.
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Palabras de espiritualidad

¿Qué debo hacer para que mi oración se fortalezca?

Para que la oración se refuerce, el mejor medio es “ser pacientes en las aflicciones y el desprecio”.
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Palabras de espiritualidad

¿Sabes la fuerza que tiene la oración?

No hay nada que valga más en la vida del creyente. Por eso, ¡nunca se alejen ni renuncien a ella!
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Palabras de espiritualidad

¿Qué pasa con el que no ora?

El que no ora fácilmente cae en tentación y en pecado, porque no tiene relación con Dios.
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Palabras de espiritualidad

Tu oración podría sacar un alma del infierno

¡Tan grande es la fuerza de la oración!
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Palabras de espiritualidad

Esta es la verdadera y mejor forma de orar

Así oraba Moisés, ya que, sin pronunciar palabra alguna, Dios le respondió: “¿Por qué clamas a Mí?”.
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Palabras de espiritualidad

Orando con sencillez

No pretendas ni esperes obtener resultados impresionantes o “dones” de la gracia de Dios.
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Palabras de espiritualidad

El lenguaje de la fe es la oración

La fe es la primera y principal arma para luchar contra nuestros vicios.
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Palabras de espiritualidad

El astuto no deja que el hombre ore

Pero tú, hijo, como un verdadero soldado de Cristo, lucha; aleja toda desidia y esfuérzate.
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Palabras de espiritualidad

¡Entrelacemos el ayuno con la piedad y la oración!

La piedad apacigua la parte sagaz del alma, el ayuno debilita el apetito, y la oración purifica la mente y la prepara para que pueda ver con claridad. Porque el Señor nos dejó unos mandatos adecuados...
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Palabras de espiritualidad

El poder de las oraciones de San Serafín de Sarov

“Pero... está escrito que tu esposa debe morir”, respondió el santo. Al escuchar esto, Vorotilov cayó de rodillas y, llorando desconsoladamente, le suplicó que orara para que su esposa sanara
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Palabras de espiritualidad

Ascendiendo al Cielo, por medio de la oración

Así como los peces viven y se mueven en el agua, así también nosotros podemos elevarnos a los cielos y acercarnos a Dios, por medio de la oración.
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Palabras de espiritualidad

Debes vencerte a ti mismo

No desdeñes lo que parece insignificante, pero tampoco te pierdas en ello. No ignores esas cosas pequeñas que podrían hacerte crecer.
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Palabras de espiritualidad

La lucha con los pensamientos sólo puede ser ganada llamando a Cristo con nuestra oración

La lucha con los pensamientos sólo puede ser ganada llamando a Cristo en nuestro auxilio, porque, incapaces de soportar el calor del corazón en oración, estos huyen como abrasados por el fuego.
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Palabras de espiritualidad

Dios hace milagros cuando tu oración se une a la del sacerdote

Muchas veces, cuando alguien venía a pedirme oración, le exhortaba: “¡Ora conmigo!”. Usualmente se trataba de problemas serios en familia, enfermedades, disputas... pero el milagro ocurría y las...
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